No quedan días de verano
para pedirte perdón,
para borrar del pasado
el daño que te hice yo.
Sin besos de despedida
y sin palabras bonitas,
porque te miro a los ojos
y no me sale la voz.
Si pienso en tí,
siento que esta vida no es justa.
Si pienso en tí
y en la luz de esa mirada tuya.
No quedan días de verano,
el viento se los llevó
y un cielo de nubes negras
cubría el último adiós.
Y fue sentir
de repente tu ausencia,
como un eclipse de sol,
porque no vas a mi vera.
Si pienso en tí,
siento que esta vida no es justa.
Si pienso en tí
y en la luz de esa mirada tuya.
Desde esos días de verano,
vivo en el reino de la soledad,
y nunca vas a saber cómo me siento,
nadie va a adivinar cómo te recuerdo.
Si pienso en tí,
siento que esta vida no es justa.
Si pienso en tí
y esa mirada tuya.
No quedan días de verano...